En tiempos en que el automóvil dejó de ser un producto de lujo para convertirse en un elemento más de nuestras vidas e incluso en miembro de muchas familias, el segmento básico del mercado presentó durante el año que termina diversos modelos que sin duda, harán que gran cantidad de personas ingresen al mundo de las cuatro ruedas.
Uno de ellos fue el Hyundai Eón, producido en India y que se posiciona como vehículo de base de ésta marca coreana, entrando además a competir con otros autos similares como el Suzuki Alto 800, Chevrolet Spark Life y Renault Clío Campus.
Gratas sorpresas tuvimos durante ésta particular prueba acompañada de lluvia y barro, descubriendo en él habilidades poco comunes en ésta clase de vehículos. Así pues, presentamos al Hyundai Eón en “Demos una Vuelta” de EL CARRO COLOMBIANO.
Unidad Probada: Hyundai Eón, versión básica.
Precio: $ 22.990.000 (Noviembre/2014)
La primera impresión
Sin duda el Hyundai Eón es un auto que en su segmento, sobresale por su diseño moderno y afín con los tiempos actuales. Sus líneas redondeadas le brindan una personalidad bien definida que genera atracción y afinidad con el mercado al que está dirigido, principalmente jóvenes universitarios o familias pequeñas que adquieren su primer vehículo.
El interior del Eón es sencillo y acogedor. Los asientos delanteros son suaves y amplios, con apliques de cuero sintético en los bordes que favorecen la adherencia del cuerpo. Las puertas no tienen compartimientos para guardar objetos. La consola frontal presenta un diseño acorde con el resto de los vehículos de la marca, práctica y funcional, está fabricada a base de un plástico resistente a rayones leves y presenta un fácil acceso a todos los controles desde el puesto de conducción.
Acceder a los asientos traseros es muy sencillo y allí se pueden ubicar cómodamente dos personas adultas, aunque por el poco espacio disponible para las piernas en los asientos traseros, una persona de estatura mayor a 1.80 cm, sí va a sentir algo de incomodidad.
El baúl de 215 litros de capacidad es de fácil acceso, la compuerta es liviana y puede ser manipulada sin problemas. Debajo del panel de piso que soporta el equipaje, se encuentra la llanta de repuesto con todas sus herramientas.
Aspectos Mecánicos
Hyundai quiso resaltar en éste modelo la eficiencia en consumo de combustible como una de sus principales virtudes, además de un torque bien logrado para la circulación en el tráfico urbano. Por ello, emplea en el Eón un motor Epsilon de 814 c.c. y 3 cilindros, que entrega una potencia de 55 caballos y un torque de 7,6 Kgm a 4.000 rpm.
El resto de elementos que son esenciales en el funcionamiento del vehículo, son de una configuración básica. La suspensión delantera es de tipo Mc Pherson mientras que la trasera es TBA, y sus frenos son de disco adelante y de tambor atrás.
Así mismo, la transmisión es de 5 velocidades y reversa, muy bien escalonadas de acuerdo con el tamaño y la potencia del vehículo, sacando el máximo potencial de la fuerza que éste puede ofrecer.
Comportamiento General
El comportamiento del Hyundai Eón es acorde con las exigencias del segmento al que pertenece. Durante nuestra prueba se obtuvo una excelente respuesta tanto en arranque en pendiente, como en lomas en las que se traía un impulso moderado y se necesitaba de la fuerza de la velocidad inmediatamente anterior. Con el cupo lleno la fuerza se reduce aproximadamente un 25%, pero aún así se siente la potencia de sus 55 caballos que hacen responder al vehículo en forma idónea.
La transmisión tiene relaciones de caja muy bien logradas. Los primeros cambios son cortos y le dan gran fuerza al auto al momento del arranque. En tercera velocidad fácilmente se puede llegar hasta 110 km/h manteniendo una fuerza constante, proporcional al esfuerzo que se ejerce al pisar el acelerador.
Las últimas dos marchas, ideales para mantener velocidad crucero, son suaves y largas pudiendo alcanzar la velocidad tope del vehículo sin que el motor se vea forzado.
La suspensión es muy precisa y transfiere comodidad a los pasajeros que van en los asientos traseros, adelante es un poco más rígida pero no llega a ser incómoda. La estabilidad es un punto muy a favor del Eón, pues se pueden tomar curvas a más de 80 km/h sin salirse de su rumbo ni inclinándose de acuerdo a la fuerza cinética.
A pesar de que los frenos no cuentan con sistema ABS, éstos funcionan de acuerdo a lo esperado gracias a que dan un amplio recorrido antes de ejercer bloqueo sobre los discos, produciendo un detenimiento constante y sin riesgos de deslizamiento en piso húmedo.
Pasando a la dirección, manual en la versión probada pero electroasistida en versiones superiores, al andar es suave y maniobrable al hacer cambios de carril o giros en esquinas. Cuando el auto se encuentra detenido, en cambio, se torna demasiado duraobligando al conductor a ejercer un gran esfuerzo para girar el volante, situación algo incómoda al momento de parquear en sitios estrechos.
Prestaciones
Uno de los grandes atractivos de éste tipo de vehículos es el rendimiento del combustible, y por supuesto, el Eón no es la excepción. De hecho, es uno de los autos con mejor rendimiento pues logra una autonomía entre 65 y 86 km/galón, según las circunstancias del terreno, el tráfico y el modo de conducción.
En nuestro caso, la prueba constó de un recorrido de 300 kilómetros en el que se consumió medio tanque, es decir, 4 galones de gasolina corriente. Si tenemos en cuenta que el uso urbano con sus trancones, calles en mal estado y baja velocidad promedio, es lo que más demanda uso de combustible, es claro que el Eón no ve muy afectada su eficiencia en la ciudad y sigue siendo muy económico.
Siendo un auto de vocación urbana, no está hecho para circular a velocidades elevadas. Aún así, alcanza los 100 km/h en un rango de aproximadamente 15 segundos. En primera marcha se puede llegar hasta los 58 km/h llevando al límite éste pequeño motor tricilíndrico.
A la altura de Bogotá y en una vía recta en buenas condiciones, logramos alcanzar una velocidad tope de 150 km/h en quinta marcha y régimen medio de revoluciones.
Aún cuando sus llantas son delgadas (155/70 R13) y es un auto con gran altura respecto al suelo, su andar es seguro y estable pues el centro de gravedad está bien equilibrado y la dirección rígida genera confiabilidad al momento de hacer un cambio de carril a más de 130 km/h.
Todo un Guerrero
Durante nuestra experiencia con el Hyundai Eón, el clima obligó a realizar pruebas muy exigentes teniendo que sortear lluvia, pozos de agua, trochas e incluso granizo, dándole la oportunidad al vehículo de mostrar su habilidad para lidiar con éste tipo de situaciones, como veremos a continuación.
Al tomar los charcos, la ola que se expulsa lateral y frontalmente no cae sobre el panorámico, de manera que no se ve afectada la seguridad de los ocupantes del vehículo por una posible pérdida de visibilidad. La gran altura sobre el piso contribuye al disminuir el hidroplaneo, manteniendo las ruedas sobre el asfalto la mayor parte del tiempo.
La situación climática nos llevó a transitar con el vehículo en caminos que convertidos en trochas luego de fuertes lluvias, sólo podrían ser atravesados por vehículos de doble tracción y una gran altura sobre el suelo. Pues bien, el Eón mostró allí su lado guerrero y sorteó esta ruta sin mayor reparo, claro está, llevándolo a una velocidad constante en primera marcha para evitar atascamientos o patinado en las ruedas.
Equipamiento de norma
Siendo un auto popular, no podemos esperar del Eón un equipamiento prominente o generoso en “gadgets”, pues éste segmento del mercado está más orientado a la agilidad, versatilidad y economía en consumo de combustible.
Entre los elementos disponibles se encuentran rines de aluminio cubiertos con copas plásticas, luces exploradoras delanteras, equipo de sonido con reproductor de USB, MP3 y entrada auxiliar con dos parlantes, medidores digitales de gasolina y temperatura en el tablero, computador a bordo que indica el momento ideal de accionar la siguiente marcha, vidrios manuales y calefacción de cuatro velocidades.
El equipo de seguridad desde la versión básica está compuesto por columna de dirección colapsable, barras de protección laterales en puertas, cinco cinturones de seguridad y seguro para niños en las puertas traseras.
En la versión más equipada podemos encontrar rines de lujo, aire acondicionado, dirección electroasistida, vidrios eléctricos delanteros, airbag para conductor y apoyacabezas delanteros ajustables en altura.
Conclusiones
Al conocerlo más de cerca, estamos seguros de que el Hyundai Eón es un vehículo que cumple muy satisfactoriamente con su función básica de transporte a un muy bajo costo de operación, al cual por supuesto le deberá agregar algunos pesos si desea añadirle ciertos elementos de confort.
Su pequeño motor no representa pérdida de fuerza ni una debilidad, por el contrario, es la muestra fehaciente de cómo la tecnología ha avanzado al desarrollar cada vez más potencia con el menor consumo de combustible.
El Hyundai Eón está disponible en dos versiones: Active (básica, $22.990.000) y Style ($25.990.000), precios a noviembre de 2014.
Datos Generales del Vehículo Probado
Marca: HYUNDAI
Línea: EÓN
Versión: ACTIVE (BÁSICA)
País de Origen: INDIA
Precio: $ 22.990.000 (NOV/2014)
Medidas
Longitud: 3,49 m
Ancho: 1,55 m
Alto: 1,50 m
Distancia entre ejes: 2,38 m
Peso vacío (kg): 1.190
Capacidad Baúl (litros): 215
Capacidad Tanque (gal.): 8,4
Puestos: 4
Aspectos Mecánicos
Motor: Epsilon 0.8 MPI
Ubicación: Delantera transversal
Combustible: Gasolina Corriente
No. Cilindros: 3
Cilindraje: 814 c.c.
Alimentación: Inyección Electrónica Multipunto
Potencia (Caballos/RPM): 55 / 5.500
Relación de Compresión: 10:1
Torque (Nm/RPM): 75 / 4.000
Transmisión – Caja: 5 velocidades adelante + Reversa
Velocidad máxima: 150 km/h (estimado)
Consumo estimado: Ciclo Urbano: 68 km/galón – Ciclo Mixto: 78 km/galón – Carretera: 86 km/galón
Tracción: Delantera
Frenos Delanteros y Traseros: Discos / Tambor
Llantas Ancho/Perfil/Diámetro: 155/70 R13
Dirección: Electroasistida MDPS (Versión Style)
Galería Fotográfica
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Equipo de Redacción y Producción Revista Virtual El Carro Colombiano.
Prueba y fotografías: Nicolás Ramírez Ordóñez. Textos: Nicolás Ramírez Ordóñez – Óscar Julián Restrepo Mantilla.
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